lunes, 23 de julio de 2018

Rincón del Arte (RDA): Recuerdos y Añoranzas


De Rincón de Arte (RDA)  se pueden decir muchas cosas, que en su oportunidad otros las dirán.  Tengo muchas anécdotas que  recuerdo de manera difusa, por lo que no las puedo documentar, salvo las fotos que presento en este escrito; le dejo la tarea a los rinconeros digitales, para lo  cual propongo una memoria oral rápida que permita hacer acopio de la documentación suelta sobre el mismo, para realizar un recuento más acabado.

Por Pedro Taveras

Miembros de Rincón del Arte junto al doctor  Julio Jaime Julia
(Foto cortesía de Persio Pérez)
Rincón del Arte (RDA) fue una agrupación de jóvenes con sensibilidad artística e intelectual del municipio de Moca, Provincia Espaillat, que realizó múltiples y grandes actividades entre el último lustro de la década de 1980 y el primero de 1990,  Esas acciones culturales eran realizadas con muy bajo presupuesto, encontrándose el voluntariado como virtud para el sostén de las mismas.

No estuvimos  presente en la reunión fundacional de Rincón del Arte, pero si recordamos y participamos del activismo del grupo al final de la década de los ´80,, en el Garaje de la calle 26 de Julio, que funcionaba como local.

En ese viejo Garaje, una noche, conocimos y  tratamos de manera personal al cantante y músico Paín Bencosme, con quien conversamos sobre Cuba y Silvio Rodríguez, desde entonces compartimos con él y lo escuchamos en sustitución del artista cubano (Se podría “falsificar” a Silvio y  sería  difícil que lo descubrieran, claro está con quince  años menos).

En este espacio tuvimos la fortuna de conocer mucha gente valiosa, rinconeros que hoy están en diferentes quehaceres de la vida dominicana, destacándose como abogados, educadores, artistas del canto y la composición, actores, poetas, economistas, arquitectos  filósofos y escritores de diversos géneros, etc.  

Los hombres y mujeres que integraban ‘Rincón del Arte’ tuvieron como mentores a dos grandes mocanos: Don Julio Jaime Julia, ex Director del Archivo General de  la Nación;  y Bruno Rosario Candelier, presidente de la Academia Dominicana de la Lengua.

Intentar rescatar en memorias escritas o audiovisuales los aportes de agrupaciones como Rincón del Arte, 30 años después,  no es una locura romántica; es un acto de esperanza que pretende que las generaciones presentes y futuras conozcan  que existieron formas de expresión  cultural y espiritual basadas en valores, que permitieron el desarrollo de una prole de hombres y mujeres que hoy  son referentes intelectuales y artísticos de la sociedad en un  mundo tan rápido y convulsionado.

Los aportes de Rincón del Arte a la sociedad mocana no se pueden quedar en el olvido, o en una anécdota ocasional en las redes sociales.

A nuestro parecer, Rincón del Arte tuvo la gestión cultural de mayor impacto en la Provincia Espaillat,  aunque de la misma se  sabe poco, sobre todo del papel que jugó durante los dos primeros años del Gobierno Municipal (1990-1994); ya que casi todos los integrantes del grupo se involucraron en hacer actividades y en facilitar cosas de manera voluntaria para el nuevo ayuntamiento: unos como parte del personal profesional de la sindicatura y otros  como organizadores de  actividades muy importantes como son conciertos, conferencias, tertulias y puesta en circulación de libros, como fue el caso de Pajarita de Papel de Carmen Quidiello de Bosch; y el desfile de decenas de artistas y escritores nacionales e internacionales que llegaban de todas partes; desde los escritores Miguel Mena, y Juan Bosch hasta el cantautor chileno Miguel Astudillo y el Dúo peruano  ´Amauta´.

Entre las actividades realizadas por Rincón del Arte, junto al Ayuntamiento, están la Muestra Iconográfica sobre el Profesor Juan Bosch, la cual tuvo un rotundo éxito por la cantidad de gente que participó y por la calidad de la organización del evento, que motivó a otras organizaciones y provincias a realizar este tipo de acciones.  En dicha muestra ofrecieron conferencias magistrales los doctores Rafael Julián, antropólogo; y  Abelardo Vicioso, poeta.

Otro evento importantísimo fue la visita  a Moca, aprovechando su presencia en Santiago de los Caballeros, de  José Linares (Pepe), una personalidad de la museografía cubana, quien fue a Moca, a petición de los jóvenes de RDA, con el propósito de discutir y evaluar las condiciones de algunos locales que servirían como museos del municipio; es decir, fue para trabajar la museografía mocana.  Fruto de esa visita se preseleccionaron lugares posibles donde se crearía el   Museo 26 de Julio, en honor al ajusticiamiento del tirano  Ulises Heureaux (Lilis) en 1899, por parte de los mocanos  Ramón Cáceres (Mon), Jacobo de Lara, y otros compueblanos, quienes abrieron otro ciclo de libertades en la República Dominicana.
A la derecha Silvano Lora, a la izquierda Silverio Ferreiras
y en el centro  don Julio Jaime Julia, mientras evalúan el
local para el Museo 26 de Julio. (Foto Pedro Taveras)

Con las ideas de hacer ese museo, para entonces, estuvieron personalidades mocanas, tales como Silverio Ferreiras, Síndico; don Julio Jaime Julia y otros que, junto a los jóvenes de Rincón del Arte, hicieron múltiples diligencias en busca de recursos en aquella época; como fue ir  a Santo Domingo a buscar al pintor Silvano Lora, también mocano, para discutir y evaluar la casa donde ajusticiaron al tirano Lilís, para la creación del Museo, el cual, afortunadamente, se llevó a cabo en el mismo lugar que se había elegido, pero 25 años después, junto a la plaza del mismo nombre. 

También, los jóvenes de Rincón del Arte, se involucraron en inventariar el patrimonio cultural y arquitectónico de Moca, para lo cual se  hicieron  reuniones entre profesionales  y estudiantes de arquitectura del grupo y se formularon los borradores de cuestionarios para la tipología de las viviendas, con la asesoría de especialistas cubanas en la materia, quienes asesoraban  en el ordenamiento del Centro Histórico de Santiago, inventariando el patrimonio arquitectónico y haciendo restauraciones en la Catedral  Santiago Apóstol. Estos de manera solidaria  y discreta, compartieron con el grupo en tertulias y reuniones de trabajo.
Silverio Ferreira, don Julio Jaime Julia, Hugo Pérez Caputo,
Silvano Lora, Yky Tejada y Benito Castillo en la casa que
 la familia Lara dispuso para el Museo. (Foto Pedro Taveras)

Otras de las actividades realizadas por Rincón del Arte fueron varias tertulias con Doña Carmen Quidiello de Bosch, fina intelectual, que calificó de valiosos a los jóvenes que formaban la agrupación. En una oportunidad dedicó su columna Reloj de Sol, en la prestigiosa y desparecida revista ¡Ahora!,  a esos jóvenes, augurándoles éxitos (como ha sucedido) y enalteciendo a Mariano García, a tal punto que lo asoció a la cumbre de los decimeros de la región, de la talla  del también mocano Juan Antonio Ali y el cubano Justo Vega.

Todas esas acciones fueron ejecutadas  sin recursos económicos, solo con el deseo de hacer cosas, tanto las realizadas de manera independiente como las desarrolladas con la sindicatura, debido a que también la administración municipal inició su gestión  sin recursos  y con hostigamientos políticos y económicos de parte del gobierno central, por ser el síndico electo de un partido contrario al del presidente de turno, en un país en medio de una crisis política nacional como pocas veces se había visto en la vida democrática de República Dominicana. 

La bomba que vale la pena recordar

Cuando los jóvenes del Rincón del Arte ingresaron al ayuntamiento lo hicieron bajo la condición de lo incondicional, y no solamente se dedicaron a las actividades de carácter cultural, si no que llenos de voluntad, junto a diversos sectores de la comunidad, en medio de la crisis se dedicaron a recoger basura y llevarla al vertedero que se había improvisado por la zona de Las Lagunas.  Aquello fue increíble para este mundo lleno de vanidad, altanería y carente de ideologías.

El nuevo Ayuntamiento estaba compuesto por gente llena del idealismo y pensamiento boschista de la época; y del deseo de servir a los demás, por eso se hicieron acciones concretas en favor de la municipalidad; pero esos proyectos fueron cayéndose cuando, entre el mismo gobierno municipal, surgió la diversidad de enfoques y de intereses, esto sumado a los hostigamientos para  que la sindicatura no obtuviera grandes logros.

 Hueco producido por la bomba lanzada en el local del 
Consejo Nacional de la Niñez (Conani). (Foto Pedro Taveras)
El hostigamiento y la persecución política eran tal que una potente bomba  fue lanzada, en la mañana del 26 de noviembre de 1990, a pocos metros de nuestra  oficina en el Ayuntamiento de Moca, donde desempeñaba las funciones de Relacionador  Público de manera honorifica.[1] 

Se presume que la bomba fue dirigida al ayuntamiento, pero cayó en el techo de zinc del local del Consejo Nacional de la Niñez (Conani) que quedaba justo al lado. 

Un agente de la policía observa hacia dentro del local por el
hueco dejado por  la bomba; mientras otros oficiales
inspeccionan el  lugar. (Foto Pedro Taveras)
Lo curioso del caso fue que aunque agentes policiales se presentaron al local, no se investigó a fondo o nunca se supo de manera oficial quien pudo haber sido el causante de tal explosión, solo nos limitamos a especular que venía del sector gobiernista, que trataba de evitar que se desarrollaran los gobiernos locales dirigidos por los opositores.  

 Recordar aquel momento terrorífico a que fue sometido el ayuntamiento en esos años de hostigamientos, donde se encontraban trabajando y colaborando algunos de  los jóvenes amigos,  relacionados y miembros del Rincón del Arte, es también reconocer el esfuerzo colectivo de ese grupo,  a pesar de todo el trauma que nos dejan las cosas diluidas en el tiempo y la individualidad.

Podemos  relatar más acontecimientos y a todas las personas que formaban parte del grupo; recordamos con mucho respeto y añoranza a muchos de ellos, pero  nombrar a tantos hombres y mujeres que hicieron aportes sustanciales a Rincón del Arte y a la promoción cultural  de la sociedad mocana,  sin que se nos  queden algunos, es un compromiso difícil de cumplir para  un desmemoriado.




[1] El día de la bomba no lo recordaba, pero en una  comunicación con Juan Luis Guzmán, destacado rinconero, me dijo que fue  el 26 de noviembre de 1990,  ya que ese día entraba por primera vez a trabajar como profesional del derecho,   

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